Personalmente (o cómo todo lo que nos rodea habla)
Siempre me ha asustado un mundo en el que imperen las grandes cadenas de venta de mobiliario. Es decir, eso de llegar a casas de amigos y ver que todas están impregnadas de ese descarado halo de IKEA, ayy que miedito.
A ver, que no soy un iluso, que los muebles de estos suecos están geniales en su relación calidad precio y que a todos nos han sacado de más de un apuro, pero también diré que son la alternativa facilona y la que más roba carisma a una casa. Y decimos esto partiendo de una idea en la que creemos firmemente: Tu casa es un prolongación de ti mismo, de tus gustos, de tu ánimo. Habla por ti y de ti.
En los últimos años han proliferado multitud de movimientos que promueven la personalización de nuestro entorno; el reciclaje de lo retro, el do-it-youself o la misma customización de muebles nuevos para adaptarlos a nuestros gustos. Todo esto nos lleva a disfrutar decorando nuestra casa, haciéndola más nuestra y sobre todo otorgando personalidad a nuestro entorno.
¿Tú qué opinas? ¿Eres de los que les gusta customizar y rodearse de cosas diferentes? Entonces no nos pierdas de vista!
