Adiós con el corazón a la furgo Volkswagen
Hace unos días hemos sabido que la Kombi, la mítica furgoneta hippie, deja de fabricarse definitivamente. Así que hemos decidido despedirla como se merece, con un post para rememorar sus curvas simpaticonas y sus colores alegres. Y es que no es fácil que un diseño se convierta en un icono, pero la furgo Volkswagen lo ha logrado de calle.
Nos cuentan en el artículo que el modelo, creado en Alemania en 1950, dejará de fabricarse en el único país que mantenía su producción, Brasil. La decisión se debe a una nueva normativa, que exige que todos los vehículos lleven airbag. Pero a pesar de ello, la Kombi permanecerá unos cuantos años por las calles de ciudades como Sao Paulo, ya que su uso como vehículo de carga está muy extendido.
La cuestión es que nos guste o no, 63 años después nos toca decir adiós a una furgoneta emblemática. Sus amantes, que pertenecen a asociaciones y celebran encuentros y concentraciones, están tristes. Pero como bien dice el presidente de la asociación «Sampa Kombi Clube Volkswagen» de Sao Paulo, «el coche está desfasado, tanto en confort como en seguridad». Y si bien todo nuevo vehículo merece un anuncio de lanzamiento, un icono como la Kombi merece también uno de «deslanzamiento».
¿Y es que quién no ha querido tener una? Claro, que siempre aparecía el amigo aguafiestas diciendo que «chupa mucho» y que dónde la piensas aparcar. Pero soñar es gratis, ¿no? Emblema de la estética hippie, nadie se resiste a fotografiarla si se la encuentra por la calle, o en un viaje.
Y que decir de la Camper, el modelo adaptado para viajar y montar el chiringuito en cualquier parte. Una chulada en toda regla, no hay quien lo niegue.
Pero la Kombi es mucho más que una furgoneta. Su diseño, que se puede representar en cuatro trazos, está presente en la moda (recordad el éxito de Cállate la boca), en pósters, en juguetes, en souvenirs… sin ir más lejos, en la mesa desde la que os escribo hay una pequeñita que pone Tarifa ^.^
La kombi queda bien en cualquier parte, o casi. Y conquista tanto a puros amantes de lo retro, como a los más poperos. Aquí os dejamos nuestra particular selección de instantáneas curiosas. Nuestra querida furgo puede ser cualquier cosa, por ejemplo un puesto en un mercadillo de antigüedades, o el coche de los novios en una boda vintage.
También es la tienda de campaña más popera de los festivales. ¡Incluso estamos viendo últimamente una versión para niños! Definitivamente los papás compran para ellos, porque nos preguntamos por aquí cuantos peques la diferencian. Eso sí, su carita amable seguro que los conquista. La lista es inagotable, sólo tenéis que echar un vistazo a Google: furgo de sidecar en una vespa, furgo de Lego, furgo de Lego súper friki cruzada con un transformer… ¡de todo encontraréis, en la viña del Señor!
De lo que no cabe duda es de que, dejen o no de fabricarla, permanecerá por largo tiempo en el imaginario colectivo. ¿La furgo ha muerto? ¡Viva la FURGO!
